El cuarzo es uno de los minerales más extendidos a nivel geológico y uno de los que más aplicaciones prácticas presenta. De la mejora de este mineral de gran resistencia surgen los grandes beneficios del cuarzo tecnológico, un material de gran belleza que ofrece un rendimiento aún mayor que el cuarzo natural.

Cuarzo: un mineral de máximo rendimiento

El cuarzo es uno de los minerales más presentes en la Tierra y está presente en las rocas silíceas. Además de por su belleza, el cuarzo destaca por su dureza y resistencia, sólo superado por el diamante, el topacio y el corindón.

Su estructura cristalina hace de él un material de gran belleza y muy apreciado en la arquitectura, donde ya se pueden ver los beneficios del cuarzo tecnológico, así como en otras áreas entre las que destacan la óptica, la electrotecnia, la metalurgia o la joyería, que hacen de él uno de los minerales más utilizados a nivel práctico.

Dentro de este mineral, existen diferentes tipos de cuarzo dependiendo de su pureza y de su aleación con otros minerales. Del contacto con otros elementos rocosos surgen tipos de cuarzo como el rosa, el verde o el azul, así como la amatista o él ágata, también derivadas del cuarzo.

¿Por qué utilizar el cuarzo tecnológico en las encimeras?

Todos los beneficios del cuarzo tecnológico hacen de este material un producto con una gran facilidad para el mantenimiento y  la limpieza, por lo que está especialmente indicado para encimeras de cocinas y baños, donde se está en constante contacto con humedad, alimentos y productos químicos que podrían estropear y limitar la higiene en otro tipo de superficies.

Su mantenimiento es muy sencillo, ya que su nula porosidad hace que no se acumulen las bacterias y la humedad, por lo que no necesita una limpieza con productos antibacterianos, simplemente con un jabón pH neutro y agua. Este sencillo mantenimiento hará disfrutar de los beneficios del cuarzo tecnológico en las encimeras de cocinas y baños durante mucho tiempo, ya que se trata de un material muy longevo.

El espacio de cocina habitual es uno de los lugares más importantes en nuestra vida, por lo que debemos cuidar su limpieza y estado, asegurando así un buen cocinar, cómodo y estable. Siempre manteniendo la estética del hogar, elegiremos una encimera u otra en función de nuestras necesidades. Aquí te daremos una serie de consejos a la hora de renovar tu encimera, exponiendo los tipos de encimera y sus usos.

Encimeras de granito

De las más utilizadas también es la encimera de granito, que aporta solidez a la cocina porque pesa muchísimo, lo que dificulta la instalación y requiere de una base para sostenerla. No se raya ni se rompe, soporta el calor perfectamente y su mantenimiento solo consiste en mantener limpia la superficie. Todo eso, y que además es barato, convierte las encimeras de granito en una de las mejores opciones para tu cocina.

Encimeras de cuarzo

Compuestas en más de un 90% por cuarzo unido con resina de poliéster, presenta una gran variedad de colores y acabados. Es más duro que el granito, por lo que tampoco podrá ser rayado, resiste bien la humedad y los golpes. Pero es muy sensible a altas temperaturas y resulta muy difícil de reparar. Es más caro también, y la encimera de cuarzo puede perder brillo si se limpia con lejía.

¿Cuál es mejor para tu cocina?

La respuesta la encontrarás en dos factores: su uso y tu presupuesto. Mientras que se recomiendan encimeras de cuarzo, corian o porcelana en cocinas muy usadas y de alta inversión, opciones baratas y de poco uso son la de madera y el laminado estratificado. Pero si buscas un diseño acorde a tu cocina, tendrías que echarle un vistazo a las encimeras de acero, vidrio, hormigón y cobre.

La cocina es uno de los ambientes que más innovaciones ha sufrido en los últimos tiempos. Su decoración se ha visto beneficiada por los distintos avances tecnológicos y la creación de nuevos materiales como el cuarzo sintético.

Las encimeras de cuarzo tienen un aspecto sofisticado, pero el peso de la piedra natural con igual tacto y una calidad superior. Este material está compuesto en un 94% por cuarzo natural, lo que le confiere una gran resistencia y belleza.

Características de las encimeras de cuarzo:

El cuarzo sintético

A la hora de planificar la decoración de la cocina hay muchos aspectos que debemos tener en cuenta, los revestimientos, el mobiliario, los electrodomésticos, etc., pero un elemento que requiere de especial cuidado es la encimera.

Los materiales del mobiliario de cocina han variado adoptándose el cristal translúcido, los lacados coloridos para frentes de cajones y puertas de armarios. Pero las encimeras siguen teniendo a la piedra como material favorito. Los tradicionales mármol y granito están dejando paso al cuarzo sintético, un pétreo compacto de alta calidad y excelente estética.

Este nuevo material es resistente a arañazos, impactos, cortes, posee una absorción mínima de líquidos, ácidos y abrasivos; se presenta bajo una amplia gama de colores para combinar con el resto del mobiliario.

La colocación de estas encimeras sobre muebles de madera puede mimetizarse con la base perfectamente. Sus tonos van desde los blancos, pasando por los grises claros, hasta llegar a la gama de los azules intensos.

El material es altamente resistente, permite un uso frecuente sin mostrar cambios de aspecto y con mínimo cuidado. Los acabados pueden ser pulido, mate o rústico.

Este nuevo material reúne las ventajas de la piedra natural y de los cerámicos en un elemento higiénico y elegante.

Aunque el principal uso de este material es para encimeras de cocinas y baños, también admite el uso como pavimento, revestimiento de paredes, para mostradores, escaleras, bañeras o mesas.

Su superficie no es porosa por lo que resulta muy resistente a las manchas. El cuarzo le confiere una dureza de 7 en la escala de Mohs (frente al diamantes que siendo el elemento más duro tiene 10), lo que lo hace más resistente a rayones y arañazos.

De todas formas, no es indestructible, por lo que exige un tratamiento normal. Tiene muy buena tolerancia al calor, pero no es recomendable apoyar directamente recipientes recién salidos del calor.

Tiene un mantenimiento sencillo, pero deben evitarse productos agresivos como el cloro, los desengrasantes o decapantes. La superficie de este material no debe pulirse.

Por lo general estas encimeras se presentan con un revestimiento antibacterias.